Ambientada durante la guerra árabe-israelí de 1967, este drama épico es tanto la historia personal de una familia bahreiní de clase media como un relato de las esperanzas y la fe que el mundo árabe tenía en Jamal Abdul Nasser como su líder. Narrado íntimamente, entrelaza hábilmente lo personal y lo general para revelar una sociedad construida sobre la dominación masculina y el sacrificio femenino, mientras las mujeres intentan disfrutar de la libertad de elección.