Al regresar de un viaje de negocios al extranjero, Jane (Bernadette Peters) tiene un mareo mientras está en casa. Como su condición no mejora, consulta a un médico que descubre que está muy enferma y que no tiene familiares que la ayuden en este momento tan difícil. Solicita la ayuda de una terapeuta (Mary Tyler Moore) que duda mucho en involucrarse en este caso debido a la pérdida que sufrió cuando era niña. A medida que su condición se deteriora, Jane aprende a aceptar su pasado, al igual que su terapeuta.