En 1961 Madrid, Ana Mari es una seguidora de Franco e instructora en la Sección Femenina. Por orden de Franco, comienza a trabajar como criada en la casa de la actriz Ava Gardner con la misión de espiarla; debe hacerse pasar por casada con el estafador Manolo, quien se convertirá en el chófer de Gardner. Manolo intenta aprovechar su posición para sus negocios turbios con clanes gitanos, y termina involucrando a Ana Mari y a su hermano esquizofrénico, Floren; esto gradualmente lleva a una relación íntima entre ellos.
Con la joven criada Pilar, servirán en las interminables fiestas que Gardner y su círculo disfrutan en la Dolce Vita reservada para la élite madrileña, fiestas que crean tensiones crecientes con sus vecinos de abajo: el General y la Señora Perón, recientemente exiliados de Argentina.