A Arian le encantan las cometas, pero un Afganistán cambiante se interpone en su camino. Cuando los talibanes toman el poder y prohíben volar cometas, él casi renuncia a su pasión. Sin embargo, para darle a su hija Seema la sensación de infancia que alguna vez tuvo, Arian arriesga su vida para encontrar y volar cometas.