En la primera de las aclamadas series de cuatro partes de Heston, el reconocido actor actúa como narrador. Un antiguo anfiteatro romano y otros lugares en Israel proporcionan el escenario para el ganador del Oscar, ya que confía en el texto King James, su habilidad dramática y observaciones perspicaces, además de grandes obras de arte y música para darle carne y hueso a la maravilla bíblica.