Fuera de cámara, con su micrófono a la vista, una entrevistadora les pide a las criaturas del zoológico que hablen sobre cómo les gusta su alojamiento, qué es bueno y qué es malo, y qué extrañan de su antigua tierra. Los animales entrevistados incluyen una familia de osos polares: al más joven de los cuales le gusta estar allí, un gran gato brasileño (que extraña el espacio y el calor del Amazonas), un simio un poco aburrido, un lémur, una tortuga que lee escapar, y una gallina que compara su vida favorablemente con la vida de sus hermanas en el circo. Hablan sobre lo que comen, sus cuartos estrechos y malolientes y la tecnología de la vida del zoológico. Son reflexivos, filosóficos y razonados.