A mediados de la década de 1920, una red de espías colaboró con intereses comerciales internacionales con el fin de rearmar a Alemania, preparándola para otra Guerra Mundial. La República de Weimar ocultó este programa secreto de armas bajo empresas ficticias de toda Europa, incluido un reconocido estudio de producción cinematográfica. Tres personajes protagonizaron esta épica aventura llena de glamour y la frenética energía de los locos años veinte: el magnate español Horacio Echevarrieta (un ciudadano local Kane), el más misterioso de todos los espías, Wilhelm Canaris; y un oficial de la Armada alemana fascinado por los negocios arriesgados, el Capitán Walther Lohmann. Juntos, construyeron el mejor submarino del mundo y soñaron con un imperio de industria militar de alta tecnología, hasta que fueron golpeados por la tormenta financiera de 1929.