Durante la Segunda Guerra Mundial, mientras la poderosa Wehrmacht de Adolf Hitler arrasa Europa, el primer ministro del Reino Unido, Neville Chamberlain, se ve obligado a dimitir y recomienda a Winston Churchill como su reemplazo. Pero incluso en sus primeros días como líder del país, Churchill está bajo presión para iniciar negociaciones de paz con Hitler o luchar de frente contra el aparentemente invencible régimen nazi, cueste lo que cueste. Por difícil y peligrosa que sea su decisión, Churchill no tiene más remedio que brillar en la hora más oscura del país.