En la ciudad de Melbourne, a principios del siglo XX, un joven delincuente llamado Squizzy Taylor se convierte en una figura prominente en el mundo del crimen. Con su astucia y audacia, logra ascender rápidamente en las filas de la delincuencia organizada.
Squizzy Taylor se convierte en un personaje legendario en la ciudad, conocido por su estilo de vida extravagante y su habilidad para evadir a la policía. Sin embargo, su éxito también atrae la atención de sus rivales, lo que lo pone en peligro constante.
A lo largo de su carrera criminal, Squizzy Taylor se ve envuelto en una serie de enfrentamientos violentos y traiciones que ponen a prueba su lealtad y su valentía. A pesar de los obstáculos, sigue adelante con determinación, demostrando ser un líder carismático y astuto.
Finalmente, la vida de Squizzy Taylor llega a un trágico final cuando es emboscado y asesinado por sus enemigos. Su muerte deja un vacío en el mundo del crimen de Melbourne, pero su legado perdura como una leyenda urbana que sigue fascinando a las generaciones posteriores.