Anuncio de servicio público destinado solo a las madres hámsteres, advirtiéndoles que no se coman a su progenie debido a los efectos dañinos que tiene en los niños humanos que los aman. Vemos a un niño pequeño, Billy, que se suicida después de presenciar la sangrienta tragedia de su hámster, Princess, comiéndose a sus bebés. Todo esto es narrado por una Tromette de gran busto en bikini, Schizophrenia.