Danny (Kent Moran) tiene un apartamento tan pequeño como su sueldo, no tiene familia y una carrera musical en apuros. Pero con un optimismo inquebrantable, para Danny, "cada día es un gran día para estar vivo". Es amor a primera vista cuando Danny conoce a Ariana (Alexia Rasmussen), una adinerada niña sorda de Greenwich, CT, que trágicamente no puede escuchar la música que ella le inspira a escribir. Ariana se debate entre aferrarse al refugio que le brinda su madre controladora (Cybill Shepherd) y luchar por un amor que, si se le da la oportunidad, podría cambiar su vida. Cuando la tragedia golpea, decididos a que nada puede separarlos, deben confiar en el poder de su amor y juntos descubrir cuán importante es "escuchar su corazón".