Después de la trágica muerte de su hija, Julie y Dennis deciden donar sus órganos. Optan por no iniciar ningún contacto con los receptores, pero permanecen abiertos a reunirse si alguien se acerca - y alguien lo hace. Vera contacta a Julie y Dennis para decirles lo agradecida que está de tener el corazón de su hija. Pero cuanto más tiempo pasa Vera con Julie y Dennis, más comienza a cruzar límites. Cuando Julie y Dennis le piden a Vera que se vaya, alguien misteriosamente saquea su hogar y vandaliza su auto.
Determinados a demostrar que Vera es la culpable, Dennis y Julie investigan el pasado de Vera y descubren que su hermana murió en el mismo accidente que su hija, quien estaba leyendo mensajes de texto de Julie mientras conducía. Ahora, Vera está sedienta de venganza y quiere hacer que Julie pague con su vida.