Ragnar Persson, un viudo de 68 años, vive en su casa de verano con su hijo, Mikael, y la novia embarazada de su hijo, Catti. Ragnar se enamora de su vecina, Vendela, que dirige un huerto de manzanos. Mikael tiene una aventura con Susanne, una amiga de la infancia que está casada con Henning, el dueño de la planta local de jugo de manzana. Se abre una gran brecha en la familia cuando Mikael, que siempre está en quiebra, acusa a Vendela de solo intentar obtener el dinero de su padre.