En un escenario de opiniones polarizadas y agendas políticas moldeadas en el Medio Oriente, es importante decir qué es y qué no es esta película. Esta no es una película con carga política, ni una que culpe a toda una nación. La intención de esta película no es agregar el prefijo "pro" a "Palestina", sino romper los estereotipos, reemplazar las afirmaciones generales con historias individuales. Esta película nos lleva a los lugares de trabajo y hogares en Palestina. Allí recibimos historias, tanto positivas como desafiantes. Esta es la única forma en que realmente podemos reemplazar nuestro deseo innato de categorizar y aislar con un deseo de aprender, para referirnos a ellos como uno de nosotros.