Los fabricantes clasifican erróneamente de forma intencionada su producto de "células madre", lo que permite ahorrar dinero al evitar las pruebas de seguridad. Estas drogas son promocionadas por una red gigante de personas influyentes en las redes sociales a quienes se les paga sobornos no revelados por sus promociones. Es una vasta red de blogueros de medicina natural, tiendas en línea, noticias falsas, cumbres en línea y series documentales falsas, y los médicos que participan son cómplices de lo que podría decirse que es un plan de crimen organizado.