Bajo la presión de la comunidad internacional, y siguiendo el fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el caso "Zorica Jovanovic versus Serbia", el Gobierno establece una Comisión Mixta, a la cual le confiere la tarea de examinar los hechos en el caso de los "bebés desaparecidos" que ha durado varias décadas.
Por recomendación del fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, la Comisión tiene la tarea de descubrir la verdad en todos los casos que sean iguales o lo suficientemente similares (desde 1970), así como de proporcionar compensación financiera a los padres.
Desde el inicio del trabajo de la Comisión, vemos que la mayoría de los miembros han mostrado poco interés en abordar este tema de manera sustancial. Un grupo de padres, cuya dedicación llevó al fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, está insatisfecho con el desarrollo de los acontecimientos.
No buscan compensación financiera; exigen la verdad sobre el destino de sus hijos. Después de un llamado sin éxito a los representantes del gobierno, los padres deciden emprender su propia investigación, la cual han estado llevando a cabo durante años - Ljuba (ex policía) explica que las "indicios" no son lo mismo que "pruebas", y que es realmente difícil probar el tráfico de bebés después de tanto tiempo, incluso si existió.