El deporte profesional es conocido como una verdadera meritocracia, un campo en el que la crema realmente llega a la cima, ya que simplemente hay demasiado dinero en juego para operar de otra manera. Sin embargo, en casos poco comunes, pueden ocurrir ineficiencias y los jugadores talentosos pueden caer en el olvido. Ésa es la historia de Lenny Cooke. En 2001, Cooke fue el jugador de baloncesto de la escuela secundaria número uno en Estados Unidos, con los futuros grandes de la NBA LeBron James y Carmelo Anthony en la lista debajo de él. Sin embargo, después de declararse elegible para el draft de la NBA de 2002, Cooke, sorprendentemente, terminó sin ser reclutado y se convirtió en un oficial jugando en ligas poco conocidas en todo el mundo. Hoy vive en el sur de Virginia, un debería haber sido un gran que simplemente no lo logró. El primer largometraje documental de Josh & Benny Safdie (Daddy Longlegs, The Pleasure of Being Robbed) de la escena del cine independiente estadounidense, LENNY COOKE explora la fascinante cuestión de cómo, exactamente, el futuro aparentemente asegurado de Cooke ...