La reciente conversión al cristianismo de Gwen, de veinte años, provoca un conflicto entre ella y su mejor amiga "fiestera". También hay tensión en casa. La madre de Gwen está luchando contra una seria adicción a los analgésicos, y su padre, un duro abogado corporativo, acaba de tomar la demanda civil contra el dueño de su nueva iglesia. La cariñosa bondad de Gwen ayuda a sanar a todos los que están "sedientos" de amor incondicional y aceptación.