Rachel, una joven estadounidense, pasa unos días libres en España. Apasionada del cine de terror, compra una camiseta con la imagen de un vampiro erótico y hermoso. A partir de ese momento, Irina la vampira se apodera de sus sueños y su voluntad. Una noche, en su hotel, Rachel asiste al espectáculo de una adivina, que se le acerca y le anuncia graves peligros.