Malcom ha terminado con su vida. Solo el ruido de Crystal Meth le da una razón para seguir adelante, todo lo demás tiene mucho tiempo a pesar de todo. Equipado con una bolsa llena de armas y bombas de fabricación propia, se dirige al centro comercial cercano para agitar las cosas. En su campaña de guerra personal, no solo cambia su vida radicalmente, sino también el destino de otras personas que están en el lugar equivocado al mismo tiempo: un adolescente cuyo pasatiempo favorito es fumar marihuana en su triste existencia, un ama de casa, donde su Han quedado atrás los mejores días, un hombre de negocios codicioso cuyo único deseo es aumentar su riqueza y un pervertido deprimido.