Mounir Mekbek vive con su familia en un pequeño pueblo en el corazón de la campiña argelina. Muy orgulloso y seguro de sí mismo, solo tiene un sueño: finalmente ser apreciado por sus compañeros del pueblo. Arruinando su imagen cuidadosamente mantenida está su testaruda y narcoléptica hermana, Rym, que se queda dormida en cualquier lugar y de quien el pueblo está convencido de que acabará siendo una solterona. Una noche, Mounir regresa de la ciudad borracho y anuncia que ha encontrado un pretendiente para su hermana. La historia falsa crece y crece hasta que el pretendiente se transforma en una rica y rubia australiana. El pueblo comienza a prepararse para la boda en serio, pero sin un novio a la vista.