No me toques el pito que me irrito
En un pequeño pueblo de la costa gallega, vive un hombre llamado Manolo que tiene una peculiaridad: no soporta que le toquen el pito. Esta aversión le ha causado más de un problema a lo largo de su vida, ya que la gente del pueblo no entiende su reacción y se burla de él.
Un día, Manolo decide ir a un psicólogo para intentar solucionar su problema. A través de las sesiones, descubre que su aversión tiene su origen en un trauma de la infancia y que es posible superarlo.
Con la ayuda del psicólogo, Manolo comienza a trabajar en su problema y poco a poco va superando su aversión. Finalmente, logra aceptar que le toquen el pito sin irritarse, lo que le permite vivir una vida más plena y feliz.
Esta historia nos enseña la importancia de enfrentar nuestros miedos y traumas para poder superarlos y vivir una vida más plena.
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No me toques el pito que me irrito
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