Ambientado en 1934 y destinado a dramatizar las injusticias sociales, este melodrama examina el intento de un funcionario de reforma agraria. Los terratenientes están en contra de cualquier reforma y tampoco están interesados en acabar con la explotación de sus trabajadores. En el lado opuesto de la valla, los nativos americanos casi no tienen forma de mejorar sus condiciones de vida o de luchar contra la opresión. También están plagados de "superstición", lo que conduce a algunas acciones equivocadas que solo empeoran las cosas. La violencia y los encuentros sexuales se intercalan a lo largo de la historia.