En la película "They Don't Wear Black Tie", dirigida por Leon Hirszman, se narra la historia de una familia de trabajadores metalúrgicos en São Paulo, Brasil. La trama se centra en la lucha de los obreros por mejorar sus condiciones laborales y salariales, mientras que el hijo de uno de ellos, Tião, se ve envuelto en un conflicto interno al tener que decidir entre unirse a la huelga o aceptar un ascenso en la empresa.
La película aborda temas como la lucha de clases, la solidaridad obrera y la presión social, mostrando cómo las decisiones individuales pueden tener un impacto en el colectivo. A través de los personajes y sus dilemas, se refleja la realidad de la clase trabajadora en un contexto de injusticia y desigualdad.
Con un enfoque realista y crítico, "They Don't Wear Black Tie" ofrece una mirada profunda a las tensiones sociales y políticas de la época, destacando la importancia de la unidad y la resistencia en la lucha por la justicia y la igualdad.