Oficiales de policía Trevor Darling y Nikki Iceton tienen que escoltar a una joven mujer aborigen al interior de Nueva Gales del Sur para enfrentar un juicio. Kath es acusada de asesinar a un tabernero que intentó violarla.
Trevor es un detective de la brigada antidrogas deshonrado que fue acusado de disparar a un joven aborigen; Nikki es una nueva recluta que piensa que él es racista. Quedan varados en el desierto cuando él decide tomar un atajo. Kath los salva con su conocimiento local, pero son seguidos por un hombre aborigen en un auto morado.
Obligados a depender el uno del otro, las líneas se difuminan entre oficiales de policía y prisionera. Para cuando son rescatados, tanto Nikki como Trevor creen que Kath es inocente. Están decididos a obtener la prueba.