Selva amazónica, 1538. El rey Carlos V de España e I de Alemania envía un grupo de soldados españoles al nuevo continente para localizar Teziutlán, una ciudad legendaria creada con oro, para reclamarla al Imperio español. Solos en la selva y sin ayuda, los soldados se enfrentan no solo a las tribus indígenas sino al odio manifiesto por sus respectivos lugares de nacimiento. Liderado por el viejo Don Gonzalo, casado con la joven Doña Ana, su envejecimiento y debilidad ponen en peligro a Ana, a quien disputan Alférez Gorriamendi, mano derecha de Gonzalo, y el soldado Martín Dávila. Luego de darse cuenta de que el Virrey de Puerto Príncipe ha enviado otra expedición a buscarlos liderada por Juan Medrano luego de acusar a Don Gonzalo de traición, Dávila, Gorriamendi y otros soldados como Sargento Bastaurrés y Barbate deben decidir si luchar contra Medrano y sus hombres o continuar hasta Teziutlan. Pero la rivalidad y el odio entre ellos revelarán más peligros que la propia selva tropical y las tribus indígenas.