Un policía (Roberts) intenta atrapar a una banda de traficantes de armas adolescentes. En el proceso, solo atrapa a uno e intenta acusarlo de varios delitos, pero falla porque el pandillero es menor de edad. Uno a uno, los amigos del joven comienzan a aparecer muertos. Depende de Dylan (Roberts) y su compañero salvar al joven del mismo destino que el resto de su pandilla.