Owen Sanders ha encontrado el trabajo perfecto. Uno que sea bien pagado, cercano a casa y, lo que es más importante, un puesto que le permite salir con la hija de su exjefe. Poco después, descubre que su nuevo trabajo en diseño web no es tan perfecto. Owen comienza a sospechar que su nuevo empleador está vendiendo algo más que imágenes en Internet. Usando sus habilidades informáticas, descubre el secreto incrustado dentro de los píxeles e intenta evitar que la subasta en línea de su empresa tenga consecuencias dañinas.