Es el verano de 1983. El flamante Boeing 767 de Canada World Airways sale de Montreal con destino a Edmonton. Cuando el avión alcanza su altitud de crucero, sucede lo imposible: el avión se queda sin combustible debido a un error de cálculo del personal de tierra en Montreal. El capitán Bob Pearson y el primer oficial Maurice Quintal enfrentan un desastre potencialmente mortal en esta historia real, ya que el 767, con unas 60 almas a bordo, cae lentamente del cielo.