Shanta y Prakashnath son brutalmente asesinados por Jaggan y sus hombres, y el único testigo es su hijo, Bhola. Bhola pide ayuda al amigo de su padre, Ram, quien acepta a Bhola y le presenta a dos amigos cercanos, Rahim y Robert. Juntos crían a Bhola y le enseñan todo lo que hay que saber sobre la lucha y el combate. Años más tarde, Bhola ha crecido y sus tres mentores le han proporcionado un nuevo nombre: Shiva y armas celestiales para ayudarlo a vencer el mal en este mundo, así como a buscar a los asesinos de sus padres y poner fin a su tiranía.