Stanley va con su familia y amigos al rancho de su tío abuelo. El magnate de la tierra local está tratando de comprar el rancho y convertirlo en un estacionamiento para su parque de diversiones cercano. La única forma en que el tío Stew cree que puede conseguir dinero para salvar su rancho es encontrar otros huesos de dinosaurio para atraer clientes. Stanley y sus amigos ayudan en la búsqueda.