Maurice Allington (Albert Finney), el personaje principal alcohólico, sexualmente promiscuo y poco atractivo, es dueño de una posada rural llamada "El hombre verde". Atemoriza y obsequia a sus huéspedes, cuando no intenta seducirlos, con historias de fantasmas y espíritus que acechan en su hotel. La diversión comienza cuando él y ellos se dan cuenta de que los lugares frecuentados son reales y malévolos. A veces, una farsa sexual, otras, un thriller de fantasmas, esta miniserie se llama acertadamente una "historia de fantasmas para adultos".