Christopher, de nueve años, vive en el centro de Allentown, Pensilvania, en 1993. Como parte de un equipo de baloncesto de adolescentes del vecindario, completamente negro, llamado "The Silk Street Gang", Christopher sueña con convertirse en su ídolo, Michael Jordan, a pesar de que él apesta al baloncesto. Sin embargo, sus compañeros tienen otros planes para él.