Labán está solo después de que su esposa Rosanna sufriera una insuficiencia cardíaca y terminara en coma. No puede manejar el vacío y en cambio comienza a vivir con su viejo osito de peluche como sustituto de ella. Labán huye con éxito de sus miedos y evita todo contacto con su esposa moribunda en el hospital, algo que su vecina Sonja no puede aceptar. Pero, ¿podrá ella comunicarse con él para que él pueda entender que debe aceptar lo que está sucediendo? ¿Laban elegirá a Rosanna por encima de sus miedos antes de que sea demasiado tarde?