Henry Stanfield es el nuevo Comisionado de la Verdad en Irlanda del Norte. Parte de su trabajo consiste en facilitar el reparto pacífico del poder en Belfast. Sin embargo, la investigación sobre el asesinato de un adolescente, que actuó como informante, saca a la luz más secretos enterrados de los que Londres o Dublín quieren dar a conocer, y varias personas, tanto en su hogar en Irlanda como en lugares tan lejanos como Estados Unidos, descubre que los viejos pecados proyectan largas sombras.