Han pasado 72 años desde que el pastor de ciervos Vukvukai vive en las profundidades de Chukotka. Es un anciano lleno de energía y sabiduría, el 'verdadero hombre de la tundra' cuya vida no se puede ver sin el ciervo. Su gente cuida una gran manada: más de 14.000 ciervos. Su vida es una lucha incesante por la supervivencia y el bienestar en las condiciones climáticas más duras de Chaun-Chukotka. Creen profundamente en la fuerza de la tradición y por eso tienen éxito en su lucha. La antigua cultura de Nomadic Chukchi se encarga de ellos, por lo que la preservan y la siguen. Hasta donde está ahora, su reino permanece estable.