Harry y Daphne se encuentran en su trabajo: parados en el escaparate de una tienda como muñecos vivientes, pasan varias horas al día sin moverse y si se mueven (se estremecen) perderán su trabajo. Una noche son testigos de un asesinato frente a la ventana, pero cuando van a la policía nadie les cree. Sin embargo, el asesino ahora les sigue la pista ...