En España, el antiguo doctor nazi Klaus intenta suicidarse saltando desde el techo de su mansión. Sin embargo, sobrevive con todo el cuerpo paralizado y dependiente de un pulmón de hierro con lados de cristal.
Su esposa Griselda decide contratar a una enfermera ya que no soporta la situación. Klaus le pide a Griselda que contrate a Angelo, un misterioso adolescente que aparece en su casa.
Angelo se hace amigo de la hija de Klaus, Rena, y pronto se muestra que Klaus era un pedófilo que amaba sentir el miedo a la muerte en jóvenes antes de abusar y matarlos.
Además, Angelo es una víctima perturbada y totalmente insana de sus experimentos que intenta seguir las locuras descritas en el diario de Klaus e incorporar su personalidad.