Atrapado por el notorio gángster Khokha Singh; un inspector de policía honesto, Satyadevi Singh, es sentenciado a cadena perpetua. Ella espera que sus tres hijos, Shakti, Anand y Romi vengan esta carnicería, pero los tres se han separado y debido a esta separación desarrollan odio entre ellos. Todos asumen diferentes trabajos e identidades en la vida.