La UK Border Force es una agencia del gobierno del Reino Unido encargada de proteger las fronteras del país y controlar la inmigración. Su principal objetivo es garantizar la seguridad nacional y prevenir la entrada ilegal de personas y mercancías.
Los agentes de la UK Border Force trabajan en puertos, aeropuertos y estaciones de tren para llevar a cabo controles de pasaportes, inspecciones de equipaje y detección de posibles amenazas. También colaboran con otras agencias de seguridad para combatir el tráfico de drogas, armas y personas.
Esta agencia juega un papel crucial en la protección de las fronteras del Reino Unido y en la lucha contra la delincuencia transfronteriza. Su labor es fundamental para mantener la seguridad y el orden en el país.