En la periferia de São Paulo, la familia disfuncional e hipócrita de clase media muy baja de Teodoro, Cláudia y la adolescente Soninha tienen secretos profundos. El religioso Teodoro es en efecto un sicario, contratado para matar gente del barrio con su amigo Waldomiro. Tiene una amante, la muy devota Terezinha, y quiere regenerarse, yendo al campo con ella. Cláudia tiene un joven amante, Júlio, que entrega carnes para la carnicería de su padre. Soninha es una adolescente común de dieciséis años de la periferia, que tiene una vida sexual activa, fuma hierba y ama el heavy metal. Cuando Júlio es asesinado y castrado en su barrio, la vida de los miembros de la familia cambia.