Luchando por mantenerse a sí misma y a su hija adolescente, la viuda Yeon-ju alquila el segundo piso de su casa a Chang-In, quien dice ser una novelista que trabaja en un nuevo libro. Los vecinos sospechan de la verdadera identidad de Chang-In, ya que pasa un tiempo excesivo en las habitaciones de Yeon-ju cada vez que se queda solo en casa. Se produce una batalla de ingenio, encanto y diversas tensiones con el trío que vive bajo un mismo techo, cada uno con sus propios motivos elaborados.