La detective Marie Výrová investiga un caso cerrado sobre el horrible asesinato de un niño pequeño en las afueras de Olomouc, que tuvo lugar treinta años antes. Está convencida de la inocencia del imputado del crimen. La historia se cuenta en parte en flashback que muestra los hechos que llevaron al asesinato y en la actualidad muestra la investigación y conclusión del caso.