Su médico le dice al nerd padre de familia Ned Hubbard que le han implantado un dispositivo de control mental en el cerebro y que algunos hombres malos lo buscan. Una asesina también lo sigue. Él va a la carrera para ir a su médico y experimenta una loca aventura tras otra que le rompe el cuello, incluida la lucha libre con un verdadero oso grizzly.