En 1993 en Warrington, Inglaterra, el niño de 12 años Tim Parry, mientras compraba una tarjeta del Día de la Madre, es uno de los dos niños pequeños asesinados por una bomba del IRA. Sus devastados padres Wendy y Colin reaccionan de manera diferente, Colin ansioso por publicitar la tragedia y hacer campaña por la paz mientras que Wendy se retira en el dolor.
En Dublín, la ama de casa Susan McHugh, al ver la atrocidad en la televisión, organiza una manifestación para protestar contra la violencia y se sorprende por la respuesta positiva. Sin embargo, ella y su esposo Arthur, quienes la apoyan, son objeto de amenazas telefónicas y acusaciones por parte de republicanos de ser pro-británicos.
Susan siente que ha fallado, pero se alegra cuando Wendy, animada por cartas de simpatía de completos desconocidos, y Colin visitan a los McHughs, apareciendo en televisión para apoyarla y hablar en nombre de todos los padres afligidos por la violencia.
Un año después se declara una tregua para poner fin a la guerra sectaria y en 1995 los Parrys establecen una fundación de paz para ayudar a las víctimas del terrorismo.