Antes de crear el amado drama judicial Rumpole of the Bailey (1978), el escritor John Mortimer encontró inspiración en su propia vida para este retrato de un amor difícil pero duradero entre padre e hijo en la Gran Bretaña de mediados del siglo XX.
La leyenda del cine Sir Laurence Olivier protagoniza al excéntrico patriarca, un abogado ciego tan terco y cascarrabias que se niega a reconocer su ceguera.
Sir Alan Bates (Gosford Park (2001)) interpreta a su devoto hijo, quien sigue los pasos de su padre en la ley mientras anhela convertirse en escritor, con Jane Asher (Brideshead Revisited (1981)) como su esposa.
Adaptada para la pantalla por Mortimer y filmada en gran parte en la finca familiar en la bucólica Oxfordshire, esta producción obtuvo múltiples premios, incluido un Emmy Internacional al mejor drama.
Por momentos hilarante y desgarradora, captura el vínculo especial entre padre e hijo, que a veces parece insoportable, pero finalmente irrompible.