Marty tenía una afección cardíaca que la hacía desmayarse todos los días. Adele era un perro de servicio de alerta cardíaca que literalmente podía sentir los latidos del corazón de Marty y evitar que se desmayara. Eran el equipo perfecto. Eran almas gemelas. Pero nada puede durar para siempre, y cuando llega el momento de la jubilación de Adele, Marty debe descubrir cómo dejar ir a su mejor amiga y encontrar una nueva pareja que pueda hacerse cargo de la tarea de proteger su corazón. Con Adele a su lado, Marty pasó de ser incapaz de caminar alrededor de la cuadra sin desmayarse, a llevar una vida aventurera y llena de alegría como esposa, madre y artista. No quiere volver a ser como era antes de Adele, pero seguir adelante es igual de aterrador. La película sigue a Marty y Adele en el difícil, doloroso, pero en última instancia, viaje que afirma la vida para dejar ir.