En solo 15 minutos con unas 30 personas Jane Elliott logra construir un microcosmos realista de la sociedad actual con todos sus fenómenos y sentimientos. Como ya se sabe por el experimento de Milgram de mala reputación, incluso los participantes que conocían las "reglas" son incapaces de permanecer al margen. Lo que comienza como un juego se convierte en una cruel realidad que provoca que las emociones de algunos participantes estallen con una intensidad imprevista ...