Cuando su salvaje hermana menor Ashley, que sufre de trastorno bipolar y adicción a las drogas, desaparece, Libba Phillips dedica todo su tiempo y energía a encontrar a Ashley y traerla a casa. A medida que pasan los años, Libba se niega a perder la esperanza y, a expensas de su matrimonio y su carrera, Libba encuentra su vocación en la vida: crear un centro de recursos muy necesario para otras familias cuyos seres queridos desaparecidos se han olvidado. .