Winnipeg, marzo de 1988. En las oscuras horas de la madrugada, la policía, con sólo descripciones vagas de los sospechosos, persigue activamente a dos de los autores de un robo. En esa persecución, el agente Robert Cross se enfrenta a un indio nativo que termina sin tener nada que ver con el robo, pero a quien Cross dispara y lo mata en el enfrentamiento subsiguiente. Ese hombre es John Joseph Harper - J.J. - que estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado mientras caminaba a casa después de una noche de fiesta con amigos en un bar. El problema para la policía es que J.J. es el muy respetado Jefe de la Reserva de los Lagos del Norte y recientemente nombrado Director Ejecutivo del Consejo Tribal Aborigen. Sin embargo, no hay testigos presenciales del tiroteo real y, por lo tanto, Cross puede tener su relato como el único en la conciencia pública, que según él incluye a J.J. agarrando su arma, lo que resultó en dispararle a Cross para protegerse. En privado, Cross se está desenmarañando mentalmente sobre su ...